22.11.10

TU MANO



Un poema en prosa de Rafael José- Díaz

Esperaba tu mano para llevarla a mi boca. Sólo llegó, al final de la noche, un breve resplandor: llama blanca, delgada, que ardía entre las jambas a la altura precisa de una mano suspendida. Única ofrenda nocturna, tan breve que no pude fijarla, que no pudo mi boca enredarse entre los dedos de esa llama carnal

1 comentario:

Rafael-José Díaz dijo...

Gracias, estimado amigo, por publicar este texto mío en tu estupendo blog. Un fuerte abrazo. Rafael.