4.9.12

EL LIGUE DE LAS DUCHAS





Fragmento extraído de la novela

Pao-Pao de Vittorio Tondelli



Por otra parte la Bigotes con su bello Mauricio que es aquel famoso ligue en las duchas de los Llancers, también él jovencísimo, con ojazos azules oscuros y el pelo rizado y negro y una cara muy enjuta y de contornos antiguos, y un cuerpo largo y estrecho de adolescente y una estatura no demasiado alta, un metro ochenta y siete, dos centímetros más del nivel mínimo para entrar a formar parte de nuestra sociedad. Mauricio siempre ríe, hace de pintor, acabó el año pasado el Liceo artístico, es de Arona, el Lago Maggiore, y , mira por donde, es el más viejo de todos nosotros, desde el punto de vista del reemplazo, naturalmente. La historia de su ligue en las duchas se convertirá en un clásico de nuestros chismorreos, para ser que la Bigotes fue a aquel lugar a una hora desierta, hacia las tres de la tarde, y había visto que Mauricio se duchaba con malicias, es decir, que se la pelaba con el agua caliente. la Bigotes se metió dentro y le dijo que tenía un culazo magnífico, tan blanco, en contraste con el bronceado general u él sonrió, Miss Sonsirsa, y dijo que era mérito del sol de Ostia. Imaginaos la escena. Por la noche lo arrastró al Giolitti, hablaron y se hicieron amigos y Radiomacuto fisgoneó que besa magníficamente, pero sólo se deja hacer eso, ni dar ni recibir; pues bien, qué haremos. Nos tendremos que contentar.



1 comentario:

Sex Shop dijo...

Muy buenoooo!!!